MIGUEL ÁNGEL MANCERA, INVESTIGADO POR ASESINATO

De la redacción

De nueva cuenta se encuentra en el “ojo del huracán” el senador del PRD, Miguel Angel Mancera Espinosa, toda vez que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) ha iniciado una amplia investigación en su contra por estar relacionado con el asesinato de Martín Rodríguez Sánchez, presidente del Consejo Internacional de Empresarios, ocurrido el pasado 22 de enero en la colonia Nápoles, alcaldía Benito Juárez.

Informes proporcionados señalan que la víctima mantenía una estrecha relación con Miguel Angel Vázquez Reyes, –preso actualmente- operador político y financiero de Mancera, con quien en diversas ocasiones había sostenido acaloradas discusiones por presuntos faltantes económicos en las transacciones que los tres realizaban en forma ilícita  y que consistieron en la creación de 12 empresas “fantasmas” con las que cobraron 976 millones de pesos –48.8 millones de dólares- mediante desvíos recursos realizados mediante la Secretaría de Finanzas (Sefin) del Gobierno capitalino.

Estos contratos se adjudicaron a cuatro empresas entre 2017 y 2018 para funciones que la Sefin realizaba sin costo desde 2014, como realizar la solicitud de devoluciones sobre el pago de impuesto sobre la renta (ISR) retenido a los trabajadores del Gobierno de la capital mexicana.

Las compañías beneficiadas se relacionaron a su vez con otras ocho por medio de direcciones, socios y números telefónicos.

“Las 12 empresas movieron en 2018 más de 1.500 millones de pesos (alrededor de 75 millones de dólares) entre ellas con transferencias en dólares y depósitos a varias cuentas, una de ellas en Ginebra, Suiza”, señalan los documentos proporcionados.

La investigación detalló que el primero de los contratos se firmó cuando Mancera era el jefe de Gobierno de Ciudad de México y el subsecretario de Desarrollo y Capital Humano en la Sefin era Miguel Ángel Vásquez, quien está en prisión, acusado de desvío de fondos.

Los otros tres contratos se firmaron cuando José Ramón Amieva sustituyó como jefe de Gobierno a Mancera Espinosa, quien inició su campaña para el Senado.

.Los mismos documentos, que también forman parte de una investigación abierta sobre este caso, señalan que este patrón es propio de esquemas para “lavar” dinero, posiblemente derivado del desvío de recursos públicos.Esta no es la primera vez que hay acusaciones contra funcionarios del pasado Gobierno de Ciudad de México, ahora en poder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Es de recordar que la Fiscalía General de Justicia de la capital anunció una solicitud para desaforar al diputado Mauricio Alonso Toledo, al que acusa de “enriquecimiento ilícito” cuando dirigía la delegación (demarcación) Coyoacán de la capital mexicana y que aún está prófugo.

La misma fiscalía anunció en febrero pasado el arresto de Miguel Ángel Vásquez, operador financiero del Gobierno capitalino durante el mandato de Mancera por un presunto caso de corrupción valorado en 293 millones de pesos (unos 14,65 millones de dólares). Dentro de este tema, es necesario señalar que de acuerdo con los datos de las indagatorias, Vásquez y Mancera no han perdido comunicación y hasta hace un par de semanas, habían hablado también con Martín Rodríguez vía telefónica para recordarle que les debía reponer el dinero que “les transó” –50 millones de pesos- mediante las 12 empresas “fantasmas” que él mismo creó por instrucciones de Mancera y que le daban de plazo 15 días para que depositara en la cuenta personal del senador morenista. pero el intervalo se venció.

Fue entonces que tanto Vásquez Reyes y Mancera Espinosa se pusieron de acuerdo para planear el asesinato del empresario. En el Reclusorio Norte, el ex funcionario contactó a Pedro Martínez, líder de un grupo delictivo denominado “Los Chicarcas”, para que desde ahí ordenara a “su gente” que se encuentra en libertad, que asesinara a Martín Rodríguez.

Una vez que le proporcionó los datos personales y lugares que frecuentaba “el objetivo”; tres días después, dos sujetos que viajaban a bordo de una motocicleta color negro, lo “estaban cazando” y cuando la víctima se dirigía hacia un parque para realizar sus ejercicios en la colonia Nápoles, se acercaron sigilosos y el que iba como copiloto, sacó un arma de entre sus ropas y le disparó en siete ocasiones a quemaropa.

Por este trabajo, Pedro Martínez, recibió 10 mil pesos como pago y de esa cantidad, a cada uno de sus sicarios les dió mil 500 pesos.